18.5.08

EL KAKUY

El Kakuy: un hermano y una hermana vivían solas en el bosque, prodigándole aquel tanta ternura y cuidado que nunca se conoció mayor afecto fraterno que el suyo. Nada le hizo faltar a su hermana. Del bosque traíale la mejor fruta, las mas fragantes flores y la miel mas rica , sin contar con la exquisita carne de sus animales predilectos y la de los peces que abundaban en el río. En cambio, solo recibía de ella el trato más cruel. Cansado de soportar tanto tormento, un día la invito a una "meliada", pues, según le dijo, había encontrado una colmena repleta en la copa de un árbol corpulento. Llevada por la gula, le acompaño hasta el bosque próximo y cubierta la cabeza con la manta, para protegerse de las picaduras de abejas e insectos empezó a trepar ayudada de un largo torzal. Ya en lo alto, el hermano comenzó a podar la rama del árbol y una vez concluida la tarea desapareció. Sola queda la muchacha. Y de ver que no acudía su hermano, llamó. Llamó muchas veces y como no obtuviera respuesta se levantó el manto que la cubría y pudo recién darse cuenta de su tragedia. Gritó desesperadamente. Solo el eco, lejano, le contestaba. Pronto la noche cubrió el bosque. Llena de angustia aferraba con sus dos las ramas el árbol. Pero las horas de agonía, en el espasmo, transformaron los dedos en garras curvas de uñas afiladas. y cuando su ansia de bajar fue mas intensa, abrió los brazos y, transformada en pájaro, voló. Desde entonces el kakuy en su canto llama su hermano: ¡Kakuy, turay turay!.

No hay comentarios: